Para este fin de semana habíamos conseguido entradas para ir al GP de Korea. La carrera tuvo lugar en Mokpo, que es una ciudad pesquera al suroeste de Korea. Agustín, Mariola y yo nos fuimos el sábado en tren hacia la ciudad. El plan era llegar a mediodía, visitar la ciudad durante el sábado, hacer noche en algún Jinjilbang y ver la carrera el domingo. El domingo nos juntaríamos con Manu y Pakito, que son otros amigos de los que ya os he hablado en otra ocasión.
Situación de Mokpo en el mapa
Nada más llegar, comprobamos que la ciudad era un poco cutre y que no presentaba ningún atractivo. Además no estaban muy acostumbrados a ver occidentales, ya que la gente no nos quitaba el ojo cuando entrábamos en cualquier sitio, hasta los niños pequeños nos decían "Hello" al pasar a nuestro lado. Así que la tarde del sábado la pasamos un poco aburridos, dando una vuelta por la zona del puerto que nos habían recomendado en la oficina de turismo, haciendo hora para ir a cenar y ver un espectáculo de una fuente con música y luz ya por la noche, que resultó estar muy chulo.
Por la tarde dando un paseo junto al mar
La figura de la derecha se parece a Darth Vader
Mariola y Agustín en el puerto, la ciudad al fondo
Caracoles, no son iguales que los españoles...
Espectáculo nocturno en la fuente
Tras hacer noche en uno de los Jiljinbang de la ciudad, nos juntamos con Manu y Pakito en la estación de tren y nos fuimos directos al circuito. Llegamos temprano, sobre las diez de la mañana, y la carrera no empezaba hasta las tres de la tarde. Así que teníamos mucho tiempo para dar vueltas por alrededor del circuito, pasear con las banderas, tomar unas cervezas, etc. Por suerte había algunas carreras de exhibición antes de la carrera de F1, por lo que estuvimos entretenidos mientras tanto, aguantando el calor que hizo durante toda la mañana.
Calentando motores
Aquí estábamos sentados
Algún ratillo de calor pasamos
Pakito, Mariola y Manu
Se acercaba el esperado momento de la carrera, y media hora antes del comienzo empezaron a salir los primeros monoplazas. Ninguno de los cinco había estado antes en una carrera de Fórmula 1, y todos nos quedamos muy sorprendidos por el ruido de los coches. Estábamos sentados en una curva, y el ruido que hacían los coches al reducir marcha cada vez que pasaban delante de nosotros era similar al de pequeñas explosiones.
Al final, la carrera se nos pasó en un momento, ganó Vettel, Alonso quedó 5º y Alguersuari 7º. Después de estar todo el día en el circuito, nos quedaba salir, ir hasta la estación de tren y un viaje de 3 horas y media hasta Seúl. Llegamos reventados después de estar todo el fin de semana en la calle, pero contentos de haberlo pasado bien.
El cámara de la tele echando una siesta antes de la carrera
¡Por fin empezó la carrera!