Korean barbacue

Anoche estuvimos cenando barbacoa cerca de casa. La barbacoa coreana es una de las mejores comidas que se pueden degustar en Korea. Es un poco más cara que cualquier comida en Korea (normalmente ir a cenar de barbacoa sale entre 9 y 10€ por persona), pero es un homenaje de obligado cumplimiento al menos una vez a la semana.

Normalmente para comer barbacoa coreana se va a restaurantes que se dedican solamente a esto. Estos restaurantes se caracterizan porque en el centro de todas las mesas hay un hueco para rellenar con ascuas, y un sitio encima para poner las parrillas. Además, sobre cada mesa, en el techo, cuelgan mangueras retráctiles que se utilizan para extraer humo y avivar más o menos las ascuas, para así ir haciendo la carne al gusto de cada uno.

Los primeros invitados de la barbacoa de anoche

Así, cuando entras en el restaurante, te indican una mesa libre donde sentarte. Una vez que te sientas, un camarero se encarga de rellenar el hueco de la mesa con ascuas, mientras el otro toma nota sobre lo que quieres comer (en casi todos sitios, la carta suele tener fotos de los diferentes tipos de carne). Normalmente no hay mucha variedad de carne para comer (2 ó 3 tipos de carne de cerdo, 1 ó 2 de pollo y 4 ó 5 de ternera), pero cualquiera está de muerte.

Una vez que has hecho el pedido, el camarero se acerca a la zona del cortador, que es donde se encuentra otro camarero con una máquina de cortar carne, al estilo de las que las que usan en las carnicerías de España para cortar lonchas de jamón, y el camarero "cortador" te corta la carne que has pedido para que te la lleven a tu mesa.

Mientras llega la carne, otro camarero te ha llenado la mesa de cuencos con diferentes tipos de salsa y vegetales, alguna sopa, y también te ha puesto otra bandeja con muchas hojas de lechuga, otro tipo de hojas grandes que saben a menta y cebollas y pimientos que también puedes ir asando en la barbacoa. Normalmente hay tantos cuencos que apenas hay espacio para poner nada más sobre la mesa.

Una vez que la carne está cortada, el camarero la lleva a tu mesa, y poco a poco la va poniendo sobre la parrilla, la corta y la cocina delante tuya, azuzando las ascuas con el extractor cuando hace falta o dejando la carne reposar cuando es necesario. De vez en cuando, pasa algún otro camarero cambiando las parrillas que ya están grasientas por otras limpias o cambiando las ascuas que ya están flojillas por otras nuevas.

Foto mesa completa

Los que comemos solamente nos tenemos que preocupar de ir cogiendo los trocitos que tienen mejor pinta en la barbacoa, y de elegir entre todas las opciones que tienes en la mesa, con qué salsa mas a mojar la carne o en qué hoja de lechuga la vas a envolver antes de metértela en la boca. 

Por supuesto, como mandan los cánones, todo regado con unas buenas cervezas fresquitas. Sin duda alguna, un lujo que haría las delicias de más de uno por España.